Por.Mercedes Cabanillas
Coincido con Nicolás Lynch, en lo sustantivo, cuando expresa su preocupación por la situación actual de la universidad. Es una verdad harto conocida, afirmar que ésta atraviesa por una profunda crisis que le impide contribuir a la solución de los problemas del país. El descontento social es generalizado, no solo por el bajo nivel en la calidad de la enseñanza, sino porque se advierte que no existe una adecuada articulación entre la universidad y el desarrollo nacional. El problema es mucho más complejo, lo que nos obliga a legislar con prontitud y rigor, de cara a una realidad cada vez más exigente por el desarrollo de nuevas tecnologías y nuevas especialidades técnico-productivas.
Somos conscientes de esta urgencia, por lo que no es exacto que Nicolás Lynch diga que a mi pedido la Comisión de Educación “decidió no discutir la propuesta de una nueva ley universitaria y mandar el predictamen al archivo”. Falso. Ni fue pedido, ni está archivado: se encuentra en Orden del Día de la Comisión para su debate,
Será necesario, por razones metodológicas y prácticas, identificar y agrupar los aspectos esenciales, trascendentes e ineludibles por legislar, como: qué tipo de universidad queremos, y, en concordancia, atribuirle los fines y objetivos correspondientes; su forma de gobierno y estructura orgánica; el procedimiento de elección de autoridades; los alcances de gratuidad en la educación superior; la formación profesional orientada a los requerimientos del mercado laboral y en la dirección del crecimiento de los sectores económicos del país, lo cual nos debe llevar a precisar que, periódicamente, se evalúe la vigencia de las carreras ofertadas.
Como se podrá apreciar, son muchos los aspectos pendientes de debate, los cuales, sumados al tema del recurso presupuestal, en el caso de las universidades públicas, o la asimilación de la evaluación y acreditación de la calidad, convierten a las universidades en instituciones de urgente atención. En lo que respecta a las filiales universitarias, debo recordar que fue, precisamente, a mi iniciativa legislativa que en junio del 2005 se dio la Ley 28564, vigente, que restituyó el tercer párrafo del artículo 5 de la ley universitaria, “quedando prohibida la creación de nuevas filiales universitarias públicas y privadas, fuera del ámbito departamental de su sede principal”.
El contenido de esta ley, así como la incorporación de mi propuesta sobre dejar en suspenso la creación de nuevas universidades, hasta que entre en funcionamiento el Consejo de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad de la Educación Superior Universitaria (CONEAU), dicen de mi interés por la educación universitaria. Mi preocupación sobre este tema viene de mucho atrás y no obedece a exigencias mediáticas ni coyunturales.
Coincido con Nicolás Lynch, en lo sustantivo, cuando expresa su preocupación por la situación actual de la universidad. Es una verdad harto conocida, afirmar que ésta atraviesa por una profunda crisis que le impide contribuir a la solución de los problemas del país. El descontento social es generalizado, no solo por el bajo nivel en la calidad de la enseñanza, sino porque se advierte que no existe una adecuada articulación entre la universidad y el desarrollo nacional. El problema es mucho más complejo, lo que nos obliga a legislar con prontitud y rigor, de cara a una realidad cada vez más exigente por el desarrollo de nuevas tecnologías y nuevas especialidades técnico-productivas.
Somos conscientes de esta urgencia, por lo que no es exacto que Nicolás Lynch diga que a mi pedido la Comisión de Educación “decidió no discutir la propuesta de una nueva ley universitaria y mandar el predictamen al archivo”. Falso. Ni fue pedido, ni está archivado: se encuentra en Orden del Día de la Comisión para su debate,
Será necesario, por razones metodológicas y prácticas, identificar y agrupar los aspectos esenciales, trascendentes e ineludibles por legislar, como: qué tipo de universidad queremos, y, en concordancia, atribuirle los fines y objetivos correspondientes; su forma de gobierno y estructura orgánica; el procedimiento de elección de autoridades; los alcances de gratuidad en la educación superior; la formación profesional orientada a los requerimientos del mercado laboral y en la dirección del crecimiento de los sectores económicos del país, lo cual nos debe llevar a precisar que, periódicamente, se evalúe la vigencia de las carreras ofertadas.
Como se podrá apreciar, son muchos los aspectos pendientes de debate, los cuales, sumados al tema del recurso presupuestal, en el caso de las universidades públicas, o la asimilación de la evaluación y acreditación de la calidad, convierten a las universidades en instituciones de urgente atención. En lo que respecta a las filiales universitarias, debo recordar que fue, precisamente, a mi iniciativa legislativa que en junio del 2005 se dio la Ley 28564, vigente, que restituyó el tercer párrafo del artículo 5 de la ley universitaria, “quedando prohibida la creación de nuevas filiales universitarias públicas y privadas, fuera del ámbito departamental de su sede principal”.
El contenido de esta ley, así como la incorporación de mi propuesta sobre dejar en suspenso la creación de nuevas universidades, hasta que entre en funcionamiento el Consejo de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad de la Educación Superior Universitaria (CONEAU), dicen de mi interés por la educación universitaria. Mi preocupación sobre este tema viene de mucho atrás y no obedece a exigencias mediáticas ni coyunturales.
16 comentarios:
amigo del sapito que sabes de la huelga de administrativos de el 23 y 24........ es a puerta cerrada???...porfavor informa en el transcurso del dia
la unsa esta hasta las patas.
viva la alas!
la unsa esta hasta las patas.
viva la alas!
sapito lordgora mñn hay paro de los administrativos?
Estimado, reviso todas las noches su blog buscando informarme de la UNSA, lugar donde estudié. Es lamentable tomar las palabras de Mercedes Cabanillas como referencia para sustentar el problema que aqueja a buena parte de las universidades del pais.
Cabanillas aun tiene en sus manos la sangre derramada en los hechos de Bagua. Mientras estuvo en la comision de educacion del Congreso se dió la gran vida y no logró nada. ¿Por qué en los colegios no estudiamos a un gran historiados como Jorge Basadre? Es que este Sr. era enemigo del apra, sencillamente. Hace meses su nombre y el de otros de la bancada aprista circuló en diferentes medios de prensa gracias al caso Alas Peruanas, de alli que hable de calidad de educación es una burla a la inteligencia.
Honestamente esperaría más para discutir los artículos de Leon Trahtemberg, que si es un especialista en Educación, por ejemplo tenemos el artículo Predictores Escolares del Exito Universitario http://www.correoperu.com.pe/correo/columnistas.php?txtEdi_id=5&txtSecci_id=22&txtSecci_parent=&txtNota_id=290331 .
Si quieren tener a una universidad mas competitiva, mas motivante, lo unico que deben hacer bien es votar por quienes merezcan estar en el Gobierno... nada mas
La interpretación de Mercedes Cabanillas es abiertamente reaccionaria y servil a los intereses del imperialismo, pero ¿acaso no percibe el carácter de clase que insoslayablemente implica la educación?
Cuando España nos dominaba, la educación que nos impartía servia a preservar los intereses de la corona española, lo que se veía reflejado tanto en lo económico como en lo ideológico; ya que el campesinado no tenía derecho a la educación y por otro lado se impartía una ideología feudal para embrutecer a las masas, cosa que aun no ha dejado de ser; vasta escuchar el tufo adormecedor de Ciprani en la iglesia católica, ahora en la etapa del imperialismo con el protestantismo y sus variantes.
Hoy en día el problema de la educación es una expresión más de la lucha de clases, cuya raíz se encuentra en el dominio que el imperialismo ejerce sobre naciones oprimidas como el nuestro. Antes éramos fundamentalmente un destino para la exportación de mercancías, hoy en día además de esto somos fundamentalmente un destino para la exportación de capitales.
Entonces cuando mercedes cabanillas advierte que: “no existe una adecuada articulación entre universidad y el desarrollo nacional”… Esto no es mas que una afirmación a ciegas que muestra el fenómeno, pero a la vez esconde la ley que rige a tal fenómeno: la ley de la contradicción.
Sin embargo su ignorancia no se debe a que sea una tarada, sino a que ella sirve a los intereses del imperialismo a los grandes monopolios, a los grandes banqueros, a los terratenientes, pero jamás al campesinado ni a los pobres.
El problema de la educación universitaria en nuestro país es un reflejo de las relaciones de producción que ya caducaron, pues la producción nacional esta condenada al fracaso, mientras el imperialismo siga penetrando con sus monopolios. Es por esto que en el Perú mientras crece el PBI son una minoría insignificante los que se benefician mientras la pobreza sigue creciendo.
La banca, las finanzas, el comercio, los servicios van “genialmente” pero la pregunta de fondo es: ¿CÓMO VA LA INDUSTRIA Y LA AGRICULTURA? Por que si hablamos de querer articular producción con educación hablemos de esto sin discursos fariseos a los que el APRA sostiene.
Entonces la pregunta salta por su propio peso:
¿A QUE SE DEBE QUE LA EDUCACION UNIVERSITARIA SE VIENE PRIVATIZANDO PROGRESIVAMENTE??????
¿A QUE SE DEBE QUE EL PRESUPUESTO UNIVERSITARIO SEA FINANCIADO CADA VEZ MAS CON RECURSOS PROPIOS, MIENTRAS QUE LOS RECURSOS ORDINARIOS SE VIENEN REDUCIENDO PORCENTUALMENTE????
Entonces queda claro a donde apunta el “inofensivo” comentario de Mercedes Cabanillas: APUNTA PUES A BUSCAR LA APROBACION DE UNA NUEVA LEY UNIVERSITARIA MUCHO MAS REACCIONARI Y SERVIL QUE LA ACTUAL. Busca pues que los estudiantes empiecen a pagar pensiones, mensualidades, seguros, donaciones, etc. O sea seguir despojando del derecho a la educación a más de ¾ de peruanos que viven en la pobreza.
Hablan de calidad de la educación pero no hablan de la desnutrición infantil, ni de la explotación infantil, ni de la exclusión escolar (mal llamado deserción escolar).
¡¡viva el VUN!!!
La interpretación de Mercedes Cabanillas es abiertamente reaccionaria y servil a los intereses del imperialismo, pero ¿acaso no percibe el carácter de clase que insoslayablemente implica la educación?
Cuando España nos dominaba, la educación que nos impartía servia a preservar los intereses de la corona española, lo que se veía reflejado tanto en lo económico como en lo ideológico; ya que el campesinado no tenía derecho a la educación y por otro lado se impartía una ideología feudal para embrutecer a las masas, cosa que aun no ha dejado de ser; vasta escuchar el tufo adormecedor de Ciprani en la iglesia católica, ahora en la etapa del imperialismo con el protestantismo y sus variantes.
Hoy en día el problema de la educación es una expresión más de la lucha de clases, cuya raíz se encuentra en el dominio que el imperialismo ejerce sobre naciones oprimidas como el nuestro. Antes éramos fundamentalmente un destino para la exportación de mercancías, hoy en día además de esto somos fundamentalmente un destino para la exportación de capitales.
Entonces cuando mercedes cabanillas advierte que: “no existe una adecuada articulación entre universidad y el desarrollo nacional”… Esto no es mas que una afirmación a ciegas que muestra el fenómeno, pero a la vez esconde la ley que rige a tal fenómeno: la ley de la contradicción.
Sin embargo su ignorancia no se debe a que sea una tarada, sino a que ella sirve a los intereses del imperialismo a los grandes monopolios, a los grandes banqueros, a los terratenientes, pero jamás al campesinado ni a los pobres.
El problema de la educación universitaria en nuestro país es un reflejo de las relaciones de producción que ya caducaron, pues la producción nacional esta condenada al fracaso, mientras el imperialismo siga penetrando con sus monopolios. Es por esto que en el Perú mientras crece el PBI son una minoría insignificante los que se benefician mientras la pobreza sigue creciendo.
La banca, las finanzas, el comercio, los servicios van “genialmente” pero la pregunta de fondo es: ¿CÓMO VA LA INDUSTRIA Y LA AGRICULTURA? Por que si hablamos de querer articular producción con educación hablemos de esto sin discursos fariseos a los que el APRA sostiene.
Entonces la pregunta salta por su propio peso:
¿A QUE SE DEBE QUE LA EDUCACION UNIVERSITARIA SE VIENE PRIVATIZANDO PROGRESIVAMENTE??????
¿A QUE SE DEBE QUE EL PRESUPUESTO UNIVERSITARIO SEA FINANCIADO CADA VEZ MAS CON RECURSOS PROPIOS, MIENTRAS QUE LOS RECURSOS ORDINARIOS SE VIENEN REDUCIENDO PORCENTUALMENTE????
Entonces queda claro a donde apunta el “inofensivo” comentario de Mercedes Cabanillas: APUNTA PUES A BUSCAR LA APROBACION DE UNA NUEVA LEY UNIVERSITARIA MUCHO MAS REACCIONARI Y SERVIL QUE LA ACTUAL. Busca pues que los estudiantes empiecen a pagar pensiones, mensualidades, seguros, donaciones, etc. O sea seguir despojando del derecho a la educación a más de ¾ de peruanos que viven en la pobreza.
Hablan de calidad de la educación pero no hablan de la desnutrición infantil, ni de la explotación infantil, ni de la exclusión escolar (mal llamado deserción escolar).
!!viva el vun!!!
Hola sapito....mañana hay paro de administrativos?????
Una simple pregunta, acaso no es el Apra quien esta gobernando? mercedes cabanillas no tiene nada que analizar, ella y sus socios son responsables de la calidad educativa en el peru. pero de hecho que es sitemico el problema de la educacion, por que si hay un grupo minoritario que goza de una muy buena calidad educativa, y la gran mayoria debe de seguir igual, ese es el ideal para los grupos de poder y las grandes empresas, asi seguir teniendo mercado y mano de obra barata.
ELSAPOTI YA NO INFORMA PARECE QUE LES ROMPIERON LA MANO, NADA DIJERON DE LA HEUGLA, POR LA HUEVA FUI A LA UN SA
Oe sapo habal del paro pues de la unsa q paso sapo ya te olvidastes de informar
alguien sabe si hay labores en el laboratorio de fisica
sapo de la shit informa pe de la huelgaaaaaaaa
esta pagina esta hasta a sus patas no informan nada
que vieja pa fea se parece a su mamacita de los sapos
hijo de puta ese q dijo viva las
alas
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