¿FUE JESÚS UN REVOLUCIONARIO ?
JESUS,¿REVOLUCIONARIO O APOLITICO?
La predicación de Jesús sobre el Reino de Dios no concierne sola ' mente a las personas, sino también al "mundo de las personas", es decir, a las relaciones humanas, a la vida social. En tiempos de Jesús los verdaderos dirigentes de la vida religiosa y social son, para la gente del pueblo, los es cribas y fariseos. Ellos son más temidos, e incluso respetados, que las fuerzas de ocupación romanas o el sumo sacerdote del Templo de Jerusalén.
Los escribas son teólogos que conocen a fondo las Escrituras, la ley y las tradiciones religiosas del pueblo judío. Los fariseos, grupos de laicos; muy fervientes, dan gran importancia al culto, a la plegaria y a las obligaciones religiosas. Observan la Ley y las prescripciones legales al pie de la letra y esperan otro tanto del pueblo. Tienen gran influencia moral y social y disponen, para cada caso que pueda presentarse en la vida ordinaria, de una solución inspirada creen ellos en las tradiciones religiosas y en los comentarios oficiales de la Ley mosaica. Están llenos de buenas intenciones y persuadidos de ser guías seguros, modelos ejemplares para el pueblo.
Pero no son perfectos del todo. Tienen un defecto capital que Jesús denuncia con fuerza: ven la paja en el ojo ajeno y no la viga en el suyo. Descuidan la justicia, la misericordia y la buena fe. Dicen y no hacen; atan pesados fardos a las espaldas de los otros y ellos rehúsan mover la punta de un dedo. Todo esto no puede soportarse, debe ser cambiado.
En tiempos de Jesús, en su patria, las diferencias sociales están rígidamente marcadas. Hay ricos y pobres, parientes y extraños, sacerdotes de Jerusalén y levitas en las ciudades, fariseos, saduceos, publícanos. Las relaciones entre los grupos sociales están regidas por convenciones, tradiciones, reglamentos, a veces muy estrictos. Unas cosas son desaconsejadas, otras prohibidas. Así, por ejemplo, se evita frecuentar a los pastores, curanderos, sastres, barberos, carniceros y publícanos. Son profesiones despreciadas y convierten en execrables a los que las ejercen.
¿Cómo se comporta Jesús ante los prejuicios y convencionalismos sociales? Con mucha libertad. No concede importancia a ciertas observancias como lavarse las manos antes de comer, y rechaza, además, esos convencionalis mos que rigen las relaciones de los hombres de su país. Frecuenta a todo el mundo, se dirige a todo el mundo. Busca el contacto con los más pobres, con los marginados, con los que son despreciados. Y a los que se escandalizan les dice: "No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores. Estos son los que tienen necesidad de médico".
Jesús acoge también a los paganos, es decir a los no judíos. Conversa con las prostitutas, cena con Zaqueo (que tenía tan mala reputación), acepta como apóstol a Judas Iscariote, hombre ambicioso que le traicionará; tres guerrilleros se hacen discípulos suyos y encuentra normal que las mujeres le acompañen en sus desplazamientos, lo cual resulta sorprendente en aquella época La "gente bien" comenta: "Es un comilón y un bebedor, un amigo de publícanos y pecadores".
Jesús critica el orden social de su tiempo, que no es más que un orden en el desorden. Para entrar en el Reino que anuncia es preciso cambiar radicalmente el fondo de los corazones, las relaciones entre los hombres: "Muchos de los primeros serán los últimos, y los últimos los primeros. Los publícanos y las prostitutas están más próximos al Reino de Dios que vosotros". ¿Por qué?
Porque, no siendo nada socialmente, los pobres, los marginados, los excluidos, no tienen nada que perder y mucho que esperar. Están mejor preparados para recibir el mensaje de Jesús y llevarlo a la práctica. No sucede lo mismo con los fariseos, bien adaptados a un sistema social que han creado en su propio interés: tienen buena reputación, religión, están seguros de que Dios está de su parte. Triste ilusión, explica Jesús en la parábola del fariseo y el publicano.
La Buena Nueva anunciada por Jesús, obliga a una conversión que pone en quiebra la solidez y la seguridad de la Ley. Aquella obliga a los que son alguien, a reconsiderar su postura, a "desinstalarse". Supone una revolución en las relaciones humanas.
Ante esta radical contestación del orden establecido, los fariseos reaccionan violentamente. Murmuran y se burlan de Jesús. Le acusan de estar poseído por el demonio, esparcen noticias insidiosas para perjudicarle y desacreditarlo. Intentan desembarazarse de él y matarlo. Reuniendo motivos de acusación contra Jesús, estarán entre aquellos que le harán condenar a muerte.
Pero Jesús no se deja intimidar. Continúa predicando la conversión del corazón, la fraternidad universal. El tiempo apremia: "Se ha cumplido y el Reino de Dios está próximo".
Posteado por:Alexander Mamani Pino-arius09@hotmail.com
JESUS,¿REVOLUCIONARIO O APOLITICO?
La predicación de Jesús sobre el Reino de Dios no concierne sola ' mente a las personas, sino también al "mundo de las personas", es decir, a las relaciones humanas, a la vida social. En tiempos de Jesús los verdaderos dirigentes de la vida religiosa y social son, para la gente del pueblo, los es cribas y fariseos. Ellos son más temidos, e incluso respetados, que las fuerzas de ocupación romanas o el sumo sacerdote del Templo de Jerusalén.
Los escribas son teólogos que conocen a fondo las Escrituras, la ley y las tradiciones religiosas del pueblo judío. Los fariseos, grupos de laicos; muy fervientes, dan gran importancia al culto, a la plegaria y a las obligaciones religiosas. Observan la Ley y las prescripciones legales al pie de la letra y esperan otro tanto del pueblo. Tienen gran influencia moral y social y disponen, para cada caso que pueda presentarse en la vida ordinaria, de una solución inspirada creen ellos en las tradiciones religiosas y en los comentarios oficiales de la Ley mosaica. Están llenos de buenas intenciones y persuadidos de ser guías seguros, modelos ejemplares para el pueblo.
Pero no son perfectos del todo. Tienen un defecto capital que Jesús denuncia con fuerza: ven la paja en el ojo ajeno y no la viga en el suyo. Descuidan la justicia, la misericordia y la buena fe. Dicen y no hacen; atan pesados fardos a las espaldas de los otros y ellos rehúsan mover la punta de un dedo. Todo esto no puede soportarse, debe ser cambiado.
En tiempos de Jesús, en su patria, las diferencias sociales están rígidamente marcadas. Hay ricos y pobres, parientes y extraños, sacerdotes de Jerusalén y levitas en las ciudades, fariseos, saduceos, publícanos. Las relaciones entre los grupos sociales están regidas por convenciones, tradiciones, reglamentos, a veces muy estrictos. Unas cosas son desaconsejadas, otras prohibidas. Así, por ejemplo, se evita frecuentar a los pastores, curanderos, sastres, barberos, carniceros y publícanos. Son profesiones despreciadas y convierten en execrables a los que las ejercen.
¿Cómo se comporta Jesús ante los prejuicios y convencionalismos sociales? Con mucha libertad. No concede importancia a ciertas observancias como lavarse las manos antes de comer, y rechaza, además, esos convencionalis mos que rigen las relaciones de los hombres de su país. Frecuenta a todo el mundo, se dirige a todo el mundo. Busca el contacto con los más pobres, con los marginados, con los que son despreciados. Y a los que se escandalizan les dice: "No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores. Estos son los que tienen necesidad de médico".
Jesús acoge también a los paganos, es decir a los no judíos. Conversa con las prostitutas, cena con Zaqueo (que tenía tan mala reputación), acepta como apóstol a Judas Iscariote, hombre ambicioso que le traicionará; tres guerrilleros se hacen discípulos suyos y encuentra normal que las mujeres le acompañen en sus desplazamientos, lo cual resulta sorprendente en aquella época La "gente bien" comenta: "Es un comilón y un bebedor, un amigo de publícanos y pecadores".
Jesús critica el orden social de su tiempo, que no es más que un orden en el desorden. Para entrar en el Reino que anuncia es preciso cambiar radicalmente el fondo de los corazones, las relaciones entre los hombres: "Muchos de los primeros serán los últimos, y los últimos los primeros. Los publícanos y las prostitutas están más próximos al Reino de Dios que vosotros". ¿Por qué?
Porque, no siendo nada socialmente, los pobres, los marginados, los excluidos, no tienen nada que perder y mucho que esperar. Están mejor preparados para recibir el mensaje de Jesús y llevarlo a la práctica. No sucede lo mismo con los fariseos, bien adaptados a un sistema social que han creado en su propio interés: tienen buena reputación, religión, están seguros de que Dios está de su parte. Triste ilusión, explica Jesús en la parábola del fariseo y el publicano.
La Buena Nueva anunciada por Jesús, obliga a una conversión que pone en quiebra la solidez y la seguridad de la Ley. Aquella obliga a los que son alguien, a reconsiderar su postura, a "desinstalarse". Supone una revolución en las relaciones humanas.
Ante esta radical contestación del orden establecido, los fariseos reaccionan violentamente. Murmuran y se burlan de Jesús. Le acusan de estar poseído por el demonio, esparcen noticias insidiosas para perjudicarle y desacreditarlo. Intentan desembarazarse de él y matarlo. Reuniendo motivos de acusación contra Jesús, estarán entre aquellos que le harán condenar a muerte.
Pero Jesús no se deja intimidar. Continúa predicando la conversión del corazón, la fraternidad universal. El tiempo apremia: "Se ha cumplido y el Reino de Dios está próximo".
Posteado por:Alexander Mamani Pino-arius09@hotmail.com
12 comentarios:
por que hablan idioteces sapos maricas se las dan de revolucionarios y ni se atreven a revelarse ante su papito por que dejaria de mantenerlos mejor aprovechen sus propinas en cosas positivas sarta de mediocres terrucos de medio pelo que nadi les tiene miedo
NI EN SEMANA SANTA DEJAN DE JODER A LA GENT CON SU PENSAMIENTO DEL SIGLO PASADO
todo con la religión no me interesa, soy ateo y no por la estupideces de joven sino por que es una m la religión
ves sapos todo el mundo t odia, hasta lista 2 aunq la 3 no gano, MAS TRISTES LOS DEL VUN NI LOCAL LES DIERON, noc q es peor
franco perder en sus propias elecciones o q les gane gent q son inocentes
un alumno de segundo
sapos no jodan ps pura boca, pretenden ser revolucionarios tan jodidos del cerebro ya arranken nomas
oh, interezante tema a discucion, como veo, a la gentita no le gusta ir contra principios ya basados y encallados ilegalmente en sus mentes...
bueno, para mi, este señor, dudando d su existencia, si fue revolucionario, critico todo lo concerniente a las ideas d la epoca, lo veo como un mahadma gandhi, mostraba q no solo los ricos del poder tienen un futuro asegurado, sino q cualquiera, en este caso, la gran mayoria d masas, los pobres...
este señor jesus, incluso lei por algun sitio q fue un iniciador del socialismo, cosa contradictoria, le encantaba provocar a las masas, les brindaba una esperanza positibamente negativa (despues d la muerte) y cosas d esas... interezant y discutible la verdad... saludos
LaoPa
Sapito creo que Valdemar Medina desde que los hackearon ya no hablan nada de el, creo que ahora es su papi. no se olviden de publicarlo
los sacerdotes son unos mantenidos
sapos memos
los sacerdotes todos son gorgojos sociales
Ya no es como antes, como en todas partes, las tradiciones se están perdiendo.
OIGAN POLITIQUEROS POBRES DIABLOS DEJEN DE JODER A LA GENTE DEL VUN... EL VUN es la unica organización politica que se diferencia de todas esas lacras como ustedes.
amigos del sapo chekeen los cometarios q resiven ps si KIERA tiene q star relacionado al POST no pa descargar sus emociones politicas.
A mi m parece q si es un revolucionario y lei el cometario de q es comparabel con gandhi, ps creoq es mas q eso ah.. un legado muy grande en comparacion a cualkier hombre q paso por la tierra ni los mas pensadores griegos consiguieron ello, sea o no q se distorsiono en el tiempo eso es problema NUESTRO, lo q importa q garcias a un punto se ha escrito hasta hoy 2010 sobre jesus.
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